La tensión se dispara en La Promesa del 19 al 23 de mayo, y esta semana promete emociones extremas, traiciones silenciosas y secretos al borde del colapso. El palacio se convierte en un campo minado cuando Lisandro, el temido Duque de Carvajal y Fuentes, irrumpe con una presencia tan imponente como peligrosa. Su llegada no es fruto del azar, y su mirada inquisitiva amenaza con descubrir lo que jamás debería saberse: la existencia de los bebés de Catalina, la identidad oculta del padre, y la permanencia de Curro en el palacio. La familia Luján, atrapada entre la obediencia y el miedo, se ve obligada a callar frente al desprecio con el que el Duque los trata.

Pero la verdad encuentra siempre su camino, y es Adriano quien se atreve a romper el silencio: confiesa al Duque todo sobre sus orígenes, provocando un terremoto emocional. Catalina, herida por la situación, anuncia su deseo de marcharse de La Promesa. Sin embargo, Alonso logra retenerla un tiempo más, sin saber que Lisandro ha llegado con un propósito oculto.

Mientras tanto, el misterio se intensifica fuera del palacio. Lóe y Curro deciden visitar nuevamente la joyería, en busca de respuestas. López prohíbe que Ángela los acompañe, pero la joven desafía las órdenes y se presenta fingiendo ser su prometida. Allí se reencuentran con Esmeralda, quien no solo reconoce a Curro, sino que les entrega unas joyas enigmáticas junto con una información que parece sacada de un acertijo. Días después, López recibe un paquete de Esmeralda que ni él ni Curro pueden descifrar, por lo que optan por ocultarlo de momento a Ángela.

En otro rincón del palacio, María Fernández lucha por confiar en la nueva Petra. Samuel, cansado de su actitud, se enfrenta a ella con palabras duras, generando una grieta profunda entre ambos. Y si eso no fuera suficiente, Samuel recibe una carta del obispado que lo deja inquieto.

Por su parte, Ricardo finalmente logra que Rómulo le hable de su pasado con Emilia. Impulsado por Catalina, Rómulo da un paso importante: se disculpa con Pía, quien acepta sus palabras. Pero el intento de mantener la paz con Emilia fracasa cuando, durante una conversación tensa, los viejos rencores resurgen con fuerza.

En el plano empresarial, Manuel y Toño comienzan a levantar vuelo con su proyecto conjunto. La inesperada ayuda de Leocadia y la buena conexión entre Manuel y el hijo de Simona impulsan la iniciativa, aunque Simona se niega a reconciliarse con su hijo, a pesar de las buenas noticias.

Y entonces llega el gran golpe de efecto: Eugenia, cansada del rechazo de Lorenzo, decide tomar el control. Tras pedirle sin éxito al marqués que la lleve a Veracruz, desaparece por varias horas. Su regreso es explosivo. La imagen que ofrece deja sin palabras al palacio entero, especialmente a Alonso. Eugenia, con una determinación que nunca antes había mostrado, obliga a todos a replantearse su papel en esta intrincada red de secretos y manipulaciones.

Pero la traición no descansa. Mientras aparenta acercarse a Eugenia, Leocadia se alía en secreto con Lorenzo con un objetivo claro y oscuro: eliminarla del camino o devolverla al sanatorio, de una vez por todas.

Así se teje la trama esta semana en La Promesa: mentiras que se tambalean, amores que se rompen, alianzas peligrosas y una verdad que, si sale a la luz, podría destruirlo todo. No te lo pierdas… porque en La Promesa, lo imposible siempre puede suceder.